Semifrío de piña

Hoy vamos a hablar de algo diferente e infinitamente más rico.

¡Delicioso!

Además facilito, facilito.
¿Queréis darle una sorpresa a alguien? ¿Tenéis un cumple cerca? ¿Habéis invitado a alguien a vuestra casa?
Os traigo la receta de un postre riquísimo, fácil de hacer, con el que quedaréis genial y acertaréis ¡seguro!
A mí de momento no me ha fallado.

Ingredientes:

                                                                          - Caramelo líquido

                                                                          - 1 lata de piña

                                                                          - 400 ml de nata líquida

                                                                          - Azúcar

                                                                          - 2 láminas de gelatina neutra

                                                                          - Sobaos

Preparación:

Elegir el molde es fácil, no hace falta meterlo en el horno, así que puede ser cualquiera.
Aunque yo recomiendo que sea cuadrado o rectangular, es más fácil a la hora de cubrirlo con los sobaos.

Lo primero es cubrir la base con el caramelo líquido.

Después cubre la base con las rodajas de piña escurridas.

Ahora viene la peor parte.

Toca abrir toooooooooodos los sobaos.

En mi caso 12.

Es la parte más difícil así que imaginaos...

Bueno, más bien coñazo.

Y cubrimos la piña con ellos.

Yo los pongo así porque luego le daremos la vuelta y esta capa quedará de base, y es más dura que la otra zona. Nunca he probado del revés, pero creo que así aguanta mejor. 

Ahora tenemos que coger un bol con agua fría y meter las láminas de gelatina dentro durante 4 minutos.

Al menos eso pone en las instrucciones de las mías.

Yo prefiero hacerlo con gelatina neutra, pero también valdría de algún sabor.

Vamos al fuego.

Echamos en una olla (no hace falta que sea muy grande): la nata, la mitad del líquido que trae la lata de piña, 2 cucharadas soperas de azúcar y la gelatina.

Aquí podéis ver cómo queda la gelatina.
Si vuestro molde es más grande y caben todas las rodajas de piña, echad todo el líquido de la lata y otro botecito de nata, el resto igual.

Lo calentamos, sin que llegue a hervir.
Que esté todo mezclado, sin grumos de la gelatina ni restos de azúcar.

Y lo echamos por encima de los sobaos.

Yo lo voy echando a cucharadas, porque los sobaos son muy "delicados" y se pueden destrozar.

Lo metemos en la nevera, muchas horas. 

Lo mejor es hacerla el día anterior.

¡Y voilá!

¿Tiene buena pinta eh?

Truquillo: si al ir a desmoldarla baila mucho, yo la meto un ratín en el congelador para que al darle la vuelta no se me destroce.

Animaos a hacerla porque ya veis que es super sencilla y queda de lujo.

¡Buen día!

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